NO rotundo a las bolsas plásticas

Cuando era pequeña, visitaba a mis abuelos en vacaciones. Durante 3 meses mi hermana y yo invadíamos sus vidas y ellos, por su parte, nos enseñaban cosas que no se aprendían en la ciudad.  Uno de mis planes favoritos era hacer mercado con mi abuelo Pedro. Madrugábamos y salíamos en su carro, cargados de canastos y bolsas tejidas hacia la plaza de mercado, un lugar caótico y feliz, lleno de colores, aromas y gente querida.

Pasábamos siempre por los mismos puestos donde Don Pedro saludaba al vendedor, palpaba la fruta, la olía, me daba a probar algunas, pedía descuento y le dañan ñapa; transacción que daba inicio al desfile de canastos llenos de frutas, verduras, papas y maíz, que llevaríamos de vuelta a casa.

Después ibamos a la carnicería, donde comprábamos los huevos y los poníamos en unas mallas tejidas, y la carne de pollo y res, que envolvían para nosotros cuidadosamente en papel encerado. La leche la traía mi abuelo directamente de la finca en cantinas, para hacer con ella el chocolate y la mantequilla casera. Aparte se hacía el mercado de tienda, allí comprábamos los productos de aseo, los condimentos, los dulces, las galletas y todas esas cosas que fabrica el ser humano.

carpeta hecha con bolsas via: Friends of the west end park

Solo en ese lugar nos regalaban algunas bolsas plásticas que mi abuela guardaba cuidadosamente en un cajón de la cocina como si fueran un tesoro y las usaba después en cuanta cosa pudiera necesitar, algunas bolsas tenían años allí, las usaba una y otra vez hasta que se rompían. Nunca entendí esa práctica, hasta que me fui a vivir sola y aprendí un par de cosas sobre las bolsas de plástico.

Actualmente existen supermercados en todo el mundo, la bolsa plástica se ha vuelto un elemento tan común que ya no nos extraña encontrarlas en cualquier parte. Es un medio publicitario muy económico y es bastante práctica, ya que no ocupan mucho espacio y pueden contener hasta 10 kilos. 

En  2002 se fabricaron en el mundo aprox. 5 billones de bolsas de plástico: bolsas de basura de gran tamaño, bolsas gruesas para la compra y muy finas para alimentos, todas elaboradas a partir de derivados del petróleo, fuente de energía no renovable y cada vez más costosa. Así que aunque sean prácticas, livianas y baratas, al consumirlas estas agotando éste recurso no renovable y apoyando un producto altamente toxico para nuestro planeta, ya que se empiezan a degradar en 100 años y sus componentes contaminan el suelo. Cuando tienen impresiones es peor, ya que las tintas contienen residuos de plomo y cadmio, metales pesados también muy venenosos.
 

Vía plastic bag ban beguins: ABC News

Las tiendas y supermercados, conscientes ya del mal que le hacen al planeta regalando bolsas a sus clientes, han decidido reemplazarlas por bolsas plásticas biodegradables, que ayudan en algo, pero no acaban con el problema, debido a que les toma de 3 a 6 meses degradarse y necesitan de condiciones especiales para hacerlo adecuadamente. Éstos mismos supermercados se contradicen en la causa ambiental, enviandonos correspondencia envuelta en las benditas bolsas de plástico...

La única solución posible es volver a las costumbres de los abuelos. Ya en muchas partes se consiguen bosas de tela y plástico tejido que se pueden llevar al supermercado. Si usas una bolsa de tela, podrás ahorrar mínimo 6 bolsas por semana. Es decir: 24 bolsas al mes, 288 bolsas al año, 20.160 bolsas durante una vida promedio (70 años). Si solo una de cada cinco personas en Colombia pusieran esto en práctica, se ahorrarían: 2.592’000.000 de bolsas por año aprox. ¿Te imaginas cuanta energía podríamos ahorrar y cuánta basura dejaríamos de producir?

via: Reciclando en espiral

No todo tiempo pasado fue mejor, la tecnología hace ahora nuestras vidas más cómodas y nos permite comunicarnos con mayor rapidez, pero hay costumbres del pasado que deberíamos rescatar: la sonrisa del abuelo, la sensación de estar untados de fruta hasta el pelo, el olor de la leche recién ordeñada, las alegría de la gente en el mercado y las hermosas bolsas de colores que nos acompañaban cada semana.

Sardinella Sardine ennumera otros factores por los que las bolsas plásticas son un problema para el medio ambiente.

Aqui puedes ver qué acciones se están tomando a nivel mundial contra el uso de bolsas plásticas. 

Aqui puedes aprender más sobre las bolsas biodegradables.

En El Malpensante, artículo interesante Glamour a la Habana

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